Venus en el Chiquero
Os contaré , putos, que hacíais cuando torturabais
Los canallas
Lo que yo sentí y me dijeron
En la parrilla de espigas eléctricas
El ánodo en medio del sexo,
Y el cátodo en el trasero
Mojados para que la corriente fuera más
Certera y silenciosa.
Vendados los ojos, rebanando las
Uñas de los pies
Mojados picoteaban los cuervos en
Nuestros cuerpos
Hasta que la cabeza reventaba
Su cabeza era una pelota de trapo
Donde un torrente de sangre no cesaba
El que me torturaba con la hermosura
De un valiente soldado
Palpé mis sienes llenas de nombres,
Oía latir mi cuerpo en la tabla
El matarife tomaba mi boca y me
Hacía comer vidrio con estrellas
Mis labios sangraban
Y éramos valientes, aunque temblábamos
Que te deja medio vivo
El matarife que te ama, te mata
Es el silencio el que me hizo quedar sordo
¿Es mentira la muerte?
La luna es la puta pará
Aquél ignora que, para robar es necesaria
La guillotina
Cito al bacán de Grucho Marx cuando
Puso sus dedos en los rayos de la bicicleta
¡Es posible!, callaron los maestros
De la revolución, yo coloco
Mi diuca caliente entre tus tetas rusas
Y si me hubiera quedado callado
¿Qué dirían ahora?
Yo sé: venimos de Judea, de Moscú
Nuestro destino es, no mirar a todos
La doctrina creó el reino sobre la tierra
Las santas escrituras…
Estamos renegando de los manifiestos
Cabezas de pistolas,
Cabezas calientes
Yo pongo la otra mejilla en la máquina.
Escucháis los gritos de los torturados a
La hora de té
Mientras al príncipe impune lo coronaban
Al anochecer, mientras las púas de la manopla
Se clavan en el rostro
Y el ventilador dispersa la ceniza
Como un niño pajero asomado
Frente al abuelo que se muere, que se quema
Y sientes el charchazo del amante
Como la llama sobre el dedo acusador
Que la bota aplastaba crepitando
¿Todos éstos están muertos?
No pregunte huevadas, sargento
Los dos juntos fundidos
La cabeza hundida en la tina
Los miles de rostros desfigurados
Ambos sedientos, uno frente al otro,
Entre lágrimas y sonrisas
Como el amante y el sádico
Los cuerpos al acecho esperando la bala
Sobre el pescuezo
Dime, niño, hermano, puta, suelta
Un nombre
¿Quiénes eran?
Abuelo nombra al que te nombra
¿Quiénes intentan rebelarse?
Todas las balas están prontas
(De La Gran Putesía Chilensis)
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