Escritos Nocturnios

Del eterno meteorismo de cruces- suculento vómito falaz de gases

Se dice a ciencia cierta, la tan notable ejecución de pares

Semejante a explosiones cósmicas de ciertos ecos soterrados

Oh misterios diáfanos- lo que se evade huye- y quien provoca

Tales guatapiques, breves instancias desde que chocan o vibran pieles.

O al que fuere. De adorar  “no es si no propiciatorio”,

Intencional lo provocado por tripas. Donde halles vientos fugados cosecharéis  tormentas.

No bien se sabe que habemos ciertos humanos

que producimos en exceso estos avatares, que no son

 si no especies de apellidos.

Lo notable es que esto mismo, mi abuelo remitió a su padre,

 y de él en concatenación de hijos hasta mi sombra.

Lo que vulnera ciertamente “cierta intimidad más que íntima”

¿Pues es al antojo de quién, el manejo de vuestras tripas?

No es que antaño, este asunto – víctima de menores controles- siga

Siendo su fetidez horrenda, el mayor horror enmascarado.

Pues no es para menos, pues suele ocurrir a veces

como en el parto de montes o en la caída una estrella fugaz

que  el universo estalla y uno se pudre entre  nalgadas de ángeles